El padre de Juan Guaidó, que trabaja como taxista en Tenerife, asegura estar muy orgulloso del opositor que se ha proclamado presidente interino de Venezuela
El padre de Juan Guaidó, Wilmer, es un taxista residente en Tenerife desde hace 16 años que ayer recibía las felicitaciones de familiares, amigos y compatriotas por el coraje de su hijo. “Estamos muy orgullosos de él, como siempre lo hemos estado”, decía a EL PAÍS en conversación telefónica.
No había podido hablar con su hijo por la mala calidad de la señal telefónica en Venezuela, pero se habían intercambiado mensajes de WhatsApp. “Le di la bendición de padre a hijo y el apoyo”. Cuando Wilmer emigró a la ciudad española de las islas Canarias, su hijo era un universitario que se quedó con su madre y comenzaba a involucrarse en política. La última vez que le vio fue hace cuatro años en Venezuela. “Agradezco a todos el apoyo para mi hijo y la unión de los venezolanos”, añadió.