Michael Robinson, en un acto reciente.
Michael Robinson estuvo los dos días siguientes a recibir un diagnóstico de melanoma avanzado como en un mal sueño. De hecho, estaba convencido de que se trataba de un error porque, ha explicado este lunes en La ventana de La Ser, se encontraba «como una flor». Pero la realidad se confirmaba en noviembre y, como ha contado el exfutbolista y comentarista deportivo, «la ciencia había hablado» y tenía «un cáncer malo» frente al que, sin embargo, se sintió empoderado». «Es mi potestad saber si voy a vivir o no», ha afirmado.
El tumor «malo» al que se refiere el deportista supone entre el 10% y el 15% de los nuevos diagnósticos de melanoma, que en el resto por ciento de los casos se detecta como tumor primario, es decir, sin metástasis. Como resalta el oncólogo del Hospital Carlos Haya de Málaga Miguel Berciano -que no comenta específicamente sobre el caso de Robinson al desconocerlo- , el pronóstico de este tipo de tumores no tiene «nada que ver» en la actualidad con el que tenía hace apenas ocho años.
La situación se ha revertido gracias a la irrupción de dos nuevos tipos de medicamentos: los dirigidos a mutaciones específicas -la del gen BRAF es de las más frecuentes- y la inmunoterapia. Esta última, que estimula la acción del propio sistema inmunológico para hacer frente al cáncer, es por la que ha optado el oncólogo de Michael Robinson, el director de Investigación Clínica del Centro Integral Oncológico Clara Campal, Emiliano Calvo. «Decidí pedir una segunda opinión y me dijeron que él era el mejor, pero ya se sabe cómo es España, todo es el mejor», bromeaba en la radio Robinson, «pero lo era».
«El pronóstico es cada vez mejor», destaca Berciano a este diario, mientras explica que lo que era «una utopía» hace una década -curar el melanoma- es posible a día hoy. Eso no significa, sin embargo, que haya que llevarse a engaño. «Es una enfermedad muy agresiva«, subraya.
Según resultados recientes del estudio CheckMate -067 -que evalúa la eficacia de dos inmunoterapias solas o en combinación- a los cuatro años de un diagnóstico de melanoma avanzado el porcentaje de supervivencia oscilaba entre el 30% y el 53% de de los pacientes.
El comentarista no ha revelado cuál de las inmunoterapias disponibles en España -hay una variedad, algunas en fase de investigación- es la que está recibiendo, pero si parece tener claro que su situación no es muy favorable: «Es como si estuviera jugando un partido y perdiendo 2-0, pero faltara media hora y tuviera a Messi cambiándose en el banquillo», resumió.
Robinson se detectó su cáncer con un bulto en la axila y en seguida supo que era metastásico. Según explica Berciano, en algunos casos el melanoma avanzado se detecta desde el inicio con metástasis, sobre todo cuando está está en los ganglios, «las primeras estaciones de paso«.
El oncólogo del hospital malagueño señala que actualmente se investiga mucho sobre este tipo de cáncer, que no es de los más frecuentes pero que «tiene la peculiaridad de responder muy bien a la inmunoterapia«.
Por esta razón, son numerosos los ensayos clínicos que se llevan a cabo para demostrar la eficacia de distintas opciones y administradas en distintos momentos. «Ahora se estudia incluso en tumores inoperables, en lo que se llama neoadyuvancia, que pretende disminuir el tumor de forma que se pueda resecar posteriormente», comenta el especialista.